Los peirones son elementos formados por columnas o pilares que contienen una o varias imágenes de carácter religioso,
denominándose en función de la advocación principal. Estos sencillos monolitos suelen tener una base escalonada o directamente arrancar desde el suelo con planta generalmente cuadrada. En la parte
más elevada en la que se abre una pequeña hornacina a modo de pequeña capilla que suele albergar una imagen, una placa, azulejo o pintura dedicado a la Virgen o a los santos. Se remata el conjunto
con una cruz, tejadillo o cualquier otro elemento decorativo.
Se ubican en cruces de camino, como estaciones de los calvarios, a modo de agradecimiento por algún hecho o bien como
recordatorio de algún suceso.
Sirven como elementos de referencia para los caminantes, a la vez que de elementos de carácter religioso y, por lo
tanto, se les atribuyen propiedades protectoras para los viajeros o los habitantes de los lugares en los que se ubican.
Entre los límites municipales de Galve y Camarillas, encontramos un peirón dedicado a los Santos Abdón y Senén
construido en sillares de piedra. Tiene una base de planta cuadrada más ancha que el fuste, siendo también de sección cuadrada. La hornacina está abierta al lado en el que se ubica la carretera (sur)
y contiene una representación de los santos titulares en cerámica. Se corona el peirón con una losa que sobresale del fuste y una pieza de forma piramidal rematada con una cruz metálica.
Junto a la carretera de acceso a Galve encontramos dos peirones dedicados a San Antonio, quedando separados por unos 200
metros, uno junto a una curva abandonada de la carretera y otro sobre la actual carretera. El primero de ellos cuenta con planta cuadrada, con pequeños chaflanes en las esquinas. Está construido en
piedra caliza, con espacio para la hornacina cuadrada con reja protectora que alberga la imagen del santo. Se corona por una sencilla cruz de hierro. El otro peirón de San Antonio está construido en
ladrillo sobre basa de planta cuadrada de roca caliza. En su arranque tiene planta cuadrada y va disminuyendo su tamaño hasta que el fuste presenta una sección octogonal. En la parte alta cuenta con
espacios para albergar una imagen del San Antonio en cerámica, así como una placa con la fecha de construcción (2007) realizada por José María Herrero. Está rematado por una cruz metálica sobre una
piedra semicircular.
Galve conserva otro peirón, con la hornacina vacía y construido en piedra con remate piramidal. Presenta una inclinación
que puede hacerle caer.
Un geoparque o parque geológico es un territorio que cuenta con un patrimonio geológico notable, además de llevar a cabo
unos objetivos económicos y sociales claros, que permitan poner en práctica un proyecto de desarrollo en el sector turístico.
Los geoparques están basados en tres principios:
- Existencia de patrimonio geológico que sirve de eje conductor y protagonista.
- Puesta en marcha iniciativas de geoconservación y divulgación.
- Favorecer el desarrollo socioeconómico y cultural a escala local.
El Geoparque del Maestrazgo pertenece a la red europea de Geoparques de la UNESCO, por lo que cuenta con esta figura de
reconocimiento mundial. Está compuesto por un amplio territorio que incluye 43 municipios de la provincia de Teruel, albergando un rico patrimonio geológico, paleontológico y monumental.
La lista de elementos patrimoniales que alberga el Geoparque del Maestrazgo se extiende desde el ya citado patrimonio
geológico y paleontológico que incluye 67 Lugares de Interés Geológico y dos entornos de Relevancia Internacional (Global Geosites), numerosos elementos de patrimonio inmaterial como las Tamboradas
de la Ruta del Tambor y el Bombo, la técnica constructiva de la Piedra Seca o el Arte Rupestre del Arco Levantino, ejemplos de patrimonio Mundial de la UNESCO. Cuenta con 11 municipios cuyo conjunto
urbano está declarado BIC, además de un notable patrimonio paisajístico, etnográfico y natural (cuatro de los seis monumentos naturales existentes en Aragón).
El territorio se extiende por la zona centro oriental de la provincia de Teruel, formando parte de seis de las diez
comarcas de la misma, incluyendo zonas de alta montaña, angostos valles, fuertes pendientes, amplias parameras y zonas de somontano. Esta variedad favorece la existencia de paisajes muy diversos,
fuertemente influidos por la topografía que permite una variedad de formaciones vegetales como carrascales, pinares de montaña o bosques de ribera.
El desarrollo local se basa en la agroalimentación, con apuesta por los productos locales, la artesanía o la promoción
turística del territorio en colaboración con y la puesta en valor de los recursos endógenos.
La promoción a través de senderos, recorridos en bicicleta de montaña, zonas de escalada, cotos micológicos o rutas
temáticas permite la puesta en valor tanto del territorio como de los productos y recursos de los municipios que forman el Geoparque.
Más información: https://www.geoparquemaestrazgo.com/
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